Televisión
‘Camilo Superstar’ se fuerza demasiado por llegar a unas notas altas que solo Camilo Sesto podría alcanzar
“¡Ah! Si es de música tengo mucho que contar”. Óscar García Blesa, director del recomendable documental Vivir así, recordaba estas palabras de Camilo Sesto en un texto para Esquire sobre ese careo final que el divo tuvo ante las cámaras. Así respondía aquel tras aclararle el realizador que el objeto del mediometraje no era abarcar su vida íntima, sino su oficio. El cantante del registro inabarcable se relajaba en sus aposentos, los del Torrelodones donde se estableció en los setenta, en una pieza que servía como acompañamiento para su último álbum, Camilo Sinfónico. Aunque su fragilidad se hacía visible en las imágenes, su capacidad vocal se mantenía poderosa, como puede atestiguarse al escuchar de nuevo su Getsemaní.
El episodio del Evangelio sobre la Oración en el Huerto antecede a la Pasión, y encuentra a Jesús angustiado y apesadumbrado, solo acompañado de Pedro, Santiago y Juan, mientras el resto de discípulos duermen, salvo Judas en sus tratos de traición. Jesús se aboca en este pasaje a su destino, al dolor del Vía Crucis, y explicita su humanidad a la vez que pide “apartar el cáliz de amargura” para sobreponerse. En la traducción que Jaime Azpilicueta e Ignacio Artime proponen de la letra de Tim Rice, la consecución de la voluntad divina a la que se encomienda tiene solamente una condición. “Pero, pero por favor, cuando muera, cuando muera, mírame. Por favor, mira mi muerte”. Es decir, no estar solo, no sentirse abandonado.
Tiene sentido, así, que su trasunto en Vamilo Superstar, Alejandro Jato, proyecte una imagen crística de sí mismo interpretando el mencionado Getsemaní, como hará a partir del 6 de noviembre de 1975 en el Teatro Alcalá-Palace. Justo antes, el artista pierde la mirada sobre el jardín de su vivienda, boqueando caladas a un cigarrillo, mientras un cristal nos proporciona un reflejo enfrentado. Por un lado, esa combinación de planos, el del Camilo reflectado y el Camilo invocado, nos advierte del juego de espejos que pretende esta miniserie: la persona (Camilo Blanes) tras la estrella icónica (Camilo Sesto) que a su vez se veía como un Mesías con un destino marcado, que cambiaría el sino del país. Por otra, la soledad inherente a la persona-personaje, que procuró ocultarse, ya fuera por protegerse de las tentaciones y corrupciones, como por construir una mística a su alrededor.
Todo por (casi) nada
De ahí surgen las limitaciones de este Camilo Superstar que tiene su puesta de largo este domingo 19 de noviembre en Atresplayer, y que ha pergeñado Curro Novallas. Ya en su presentación, la directora de ficción de Atresmedia y productora ejecutiva de la miniserie, ya dejó claro que la propuesta “no es un biopic ni una serie musical”, a la par que aseguraba que la historia “tendría emoción aunque no fuera Camilo Sesto”.
Cierto es que el relato, dividido en cuatro episodios (Atresmedia solo facilitó los dos primeros de la lata completa, lo que siempre va en detrimento del juicio justo), solo abarca un lapso concreto de la biografía del cantante, la que transcurre desde que descubre la ópera rock en Londres hasta que logra estrenar su adaptación en Madrid. No obstante, caen en la tentación de expandirse: ahí quedan su primer viaje a Latinoamérica, su participación con Algo más en el Festival de la OTI en 1973, los problemas con el Ministerio de Información, o su relación con Lucía Bosé (Eugenia Silva), incluidos en los dos primeros episodios. Por momentos, el montaje de Jesucristo Superstar, su particular Vía Crucis, se desarrolla en un segundo plano, más como un conducto para, así sí, elucubrar sobre Sesto.
Así, la personalidad de Sesto no trasluce a través de los tejemanejes de la producción en la que empeñó un capital de 10 millones de pesetas de la época, sino de todo cuanto hay alrededor. Eso hace que Camilo Superstar se acerque en exceso a los tropos de las películas biográficas sobre estrellas del pop de la última década (la carrera musical como historia de superación), perdiendo concreción. Ya sea una ambición mal medida, o un complejo de inferioridad con otras grandes producciones de mayor alcance (la en todo caso inferior Bosé, estrenada con escasos meses de diferencia), esto diluye la personalidad del protagonista, alguien cuyo interés surgía del misterio en que se envolvía. No debiera no importar de quién se trata.
Algo de él
El interés, en cambio, reside en cómo se compone el personaje y cómo este define su identidad. Cabe decir, más intuida que explicitada. “No sé quién es Camilo Sesto de verdad”, confiesa el artista en su dramatización durante el primer episodio, donde sucede esa proyección que mencionábamos líneas atrás. Todo ello, mientras a su alrededor enuncian prejuicios sobre su imagen, sobre el “producto”. Es interesante ver cómo trabaja Jato no ya para replicar los manierismos de Sesto, sino para transmitir que sus posturas eran también impostura; véase el montage, realizado en un plano secuencia, en el que Sesto ensaya sucesivas entradas a escenarios tirando de distintos atuendos. Él, a su manera, solo ofrecía “algo de sí” a los demás, mientras los destellos de su personalidad, de la persona bajo la máscara, bajo la barba jesuita“, se proyectan confundiéndole incluso a él.
No debe desdeñarse Camilo Superstar en cualquier caso, por más que ese empeño por alcanzar las notas más altas juegue en su contra. Nada tan simbólico como que haga falta recurrir al playback en los pasajes musicales, ante la imposibilidad de llegar a aquellos registros casi divinos. Pero, a la vez, cumple cuando trata de replicar la teatralidad del gesto de su estrella.
Por lo demás, la serie deja pasajes afinados, como la escena del descubrimiento de Ángela Carrasco (Natalia Reyes), que cierra la segunda entrega, también jugando con el montaje: se funden su prueba in extremis ante Azpilicueta (Javier Godino) y Teddy Bautista (Adrián Lastra) con la siguiente ante los ojos de Camilo, partiendo de una misma pista vocal sobre la que se introducen arreglos evocadores. Aunque quizás lo mejor que pueda decirse de ella es que su acercamiento a Camilo Sesto sirva para revertir la desfiguración progresiva que el tiempo le aplicó y que se quiso corregir demasiado tarde, ya en su crepúsculo. Aunque, como demuestra Camilo Sinfónico, esos estertores siguieran sonando vigorosas aun en los estertores.
Mientras incide en su gran hazaña, la musical, el sufrimiento queda satisfecho. Camilo Superstar indaga en los sentimientos de alguien por momentos etéreo, huidizo. De ese misterio surge la voluntad de conocer más, aunque su vida y su voz se escapen a representaciones.
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Televisión
Cristina Pedroche, en apuros por su vestido de Nochevieja: ‘La cosa va rara’
Cuando hablamos de Nochevieja en España, hay un nombre que ya se ha convertido en sinónimo de atrevimiento y espectáculo: Cristina Pedroche. La presentadora lleva más de una década marcando la última noche del año con estilismos que no dejan indiferente a nadie. Este 2024 no será la excepción, aunque parece que los preparativos de su vestido están siendo más complicados de lo habitual.
En una reciente intervención en el programa Zapeando, Cristina confesó que no todo está saliendo como esperaba. Las pruebas de su vestido para este fin de año están siendo todo un desafío: «La cosa va rara». «No están saliendo muy bien las pruebas», una frase que ha encendido las alarmas entre sus seguidores, siempre ansiosos por descubrir con qué sorprenderá este 31 de diciembre.
A pesar de los contratiempos, Cristina se mostró tranquila, dejando claro que, como siempre, pondrá todo su empeño para que el resultado sea impecable. Dani Mateo, su compañero de plató, no tardó en aligerar la situación con una broma: “David te está pegando su perfeccionismo. En vez de hacerte mejor, te está complicando la vida”, comentó, refiriéndose al esposo de Cristina, el chef David Muñoz.
Este es solo uno de los muchos ingredientes que hacen de la Nochevieja con Pedroche un fenómeno único. Su vestido, siempre diseñado en colaboración con grandes nombres de la moda, se ha convertido en uno de los momentos más esperados de la noche, y ella misma ha explicado en varias ocasiones que detrás de cada estilismo hay meses de trabajo, pruebas y ajustes. Su intención, más allá del espectáculo, es transmitir un mensaje, sorprender y, sobre todo, no dejar indiferente a nadie.
Mientras el reloj avanza hacia el 31 de diciembre, la presentadora compagina los preparativos de las campanadas con otros proyectos importantes. En los próximos días, los espectadores también podrán verla en UniverXO Dabiz, la esperada docuserie de Netflix que sigue la vida y carrera de su marido, el chef más premiado de España. Cristina tendrá un papel en el documental, mostrando su faceta más personal como apoyo incondicional de Dabiz en su constante búsqueda por revolucionar el mundo de la gastronomía.
Este será el undécimo año consecutivo en el que Cristina Pedroche estará al frente de las campanadas. Desde sus comienzos en laSexta hasta su consolidación como la reina indiscutible de Antena 3, su presencia en esta cita ya es una tradición en los hogares españoles.
A lo largo de los años, hemos visto a Cristina lucir diseños que han generado debate. Cada elección estilística es una declaración de intenciones. Este año, aunque los retos sean mayores, Pedroche está decidida a superarlos. Queda menos de un mes para que descubramos qué sorpresas nos tiene preparadas en esta nueva edición de las campanadas. Mientras tanto, la presentadora sigue trabajando demostrando que su pasión por ofrecer algo único a su público sigue intacta. ¡La cuenta atrás está en marcha!.
Fuente: hola.com
Javier Cabello.
Televisión
Pınar Deniz (‘Secretos de familia’) cuenta cómo está viviendo su primer embarazo: ¿Tiene antojos? ¿Ha elegido el nombre?
Pınar Deniz esta atravesando por uno de los momentos más especiales de su vida. Tras dos años de relación, la protagonista de Secretos de familia se daba el ‘sí, quiero’ con su pareja, el también actor Kaan Yıldırım, en una romántica y divertida ceremonia celebrada en Roma el pasado 17 de septiembre. Y, tan solo una semana después de convertirse en marido y mujer, la pareja anunciaba la noticia que más felicidad les provocaba: van a ser padres. El matrimonio, que espera con emoción la llegada de su bebé, ha compartido cómo están viviendo el proceso del embarazo.
Tanto para Pınar como para Kaan, uno de sus mayores deseos era el de convertirse en papás, un sueño que están a punto de cumplir. Tras los tres primeros meses, en los que ha tenido mareos y las náuseas típicas de ese periodo de la gestación, la interprete de Vatanım Sensin, de 31 años, que ya está en el cuarto, asegura que ahora se encuentra bien.
Su cuerpo está cambiando, y su barriguita, de la que presume siempre que puede, ya ha comenzado a crecer. Sin embargo, reconoce que no ha tenido ningún capricho especial durante este tiempo. «Mi apetito ha aumentado aún más. Pero no tengo un antojo específico», aseguraba con una sonrisa a los periodistas que se interesaban por su estado en un reciente acto público al que asistía acompañada por su marido.
En pocos meses, en primavera, podrán experimentar la sensación de tener a su primer hijo en brazos. Un bebé que, tal y como han confirmado los futuros papás será un niño, aunque, al parecer, aún no tienen claro cómo quieren llamarlo. «Tenemos algunas ideas en mente, pero aún no lo hemos decidido. Lo hemos dejado para más adelante», aseguraba Kaan.
Durante el transcurso del evento, el protagonista de Siphai, de 37 años, estuvo en todo momento pendiente de su mujer. Algo que hace con gusto y que también se encarga de cuidar en la intimidad, ya que reconoce que su único objetivo ahora mismo es velar por el bienestar de Pınar. «En estas cosas, son las mujeres quienes soportan la carga y el esfuerzo. Por eso, nuestro trabajo es más fácil. Mi tarea es hacer feliz a mi esposa, satisfacer todas sus necesidades. Todo lo que esté a mi alcance. Me preocupo por su felicidad. Aparte de eso, es un proceso muy especial», afirmaba, dejando claro que su rol es mucho más sencillo que el que soporta su pareja.
Hace unas semanas, en una salida a Etiler, uno de los barrios con más ambiente de Estambul, Pınar hablaba con los reporteros que se encontraba en su paseo y les contaba que había comenzado una nueva etapa en su embarazo. «El proceso está yendo bien. Dejé atrás la parte dolorosa y pasé a la dulce. Ahora estoy en un lugar donde siento mucho más a mi bebé. Estoy feliz. Kaan y yo estamos felices», afirmaba. Además, desvelaba que había comenzado a usar ropa premamá y que estaba encantada de hacerlo por lo que eso significa.
Por otro lado, aseguraba que su vida ha cambiado y que «ahora pienso siempre en dos personas», haciendo alusión a que su familia crece y que ya no solo se preocupa de su marido, sino también de su hijo. En un momento de sinceridad, la protagonista de Condena de amor confesaba que «ojalá mi hijo no se moleste con esto en el futuro. Siempre había imaginado que sería una niña, pero ahora que será un niño, estoy muy feliz'».
Su gran historia de amor
Pınar Deniz y Kaan Yıldırım comenzaban una relación a mediados de 2022. Pero, pese a lo bonito que pueda parecer ahora, su romance no ha sido un camino de rosas y han tenido que luchar contra viento y marea para demostrar que lo suyo iba en serio, algo que han logrado sobradamente.
Todo comenzaba en el verano de 2022, cuando los actores pasaron sus vacaciones en Urla, provincia de Esmirna, en la costa turca del mar Egeo. Los dos compartían imágenes de sus días de descanso de manera independiente, tratando de ocultar que habían viajado juntos. Sin embargo, sus seguidores, a los que no se les escapa una, se dieron cuenta de que estaban el uno con el otro. En las fotografías de ambos aparecían las gafas de sol y una pulsera que lucía el actor, detalles que, sin querer, dejaban al descubierto su relación.
Este incipiente romance llegaba cargado de polémica, puesto que el actor de Bandits acababa de terminar su breve noviazgo con Hande Erçel. Fueron muchos los que especularon con el final de esa relación, señalando que el motivo de la ruptura se debió, precisamente, a que el interprete habría solapado su historia de amor con la protagonista de Love is in the air con la de Pınar. Algo sobre lo que ni Kaan ni la intérprete de Aktris quisieron pronunciarse.
Los novios hacían su primera aparición pública en septiembre de 2022. De la mano y muy sonrientes, asistían a un concierto de Melike Şahin, confirmando su relación y declarando lo contentos que estaban. A los pocos días, fueron juntos a ver una obra de teatro y a la salida afirmaron: «Somos muy felices. No queremos ocultarnos a cada minuto, vivimos nuestras vidas y participamos en eventos. Todo va bien entre nosotros», añadiendo que no estaban «pensando en casarse por ahora». Días después, la pareja daba un paso más y compartía sus primeras imágenes juntos y enamorados.
Desde ese momento y hasta el día de hoy, los actores no se han ocultado y han gritado su amor a los cuatro vientos siempre que han tenido ocasión, presumiendo en sus perfiles de su relación. El 6 de agosto de 2023, Pınar anunciaba, entre lágrimas de emoción, su compromiso, una petición que llegaba en Cambridge durante un romántico viaje de la pareja. Ahora, tras su boda el pasado mes de septiembre pondrán el broche de oro a su relación con la llegada de su primer hijo dentro de unos meses.
Fuente: hola.com
B. Moreno.
Televisión
Inés Hernand se convierte en la ganadora de ‘MasterChef Celebrity 9’
El universo de MasterChef Celebrity vivió este lunes su gran noche con la coronación de Inés Hernand como la ganadora de su novena edición. La presentadora conquistó tanto a los jueces del programa como a los espectadores con un menú que reflejaba su vida y un mensaje personal: celebrar la diversidad, el perdón y la resiliencia.
Inés se enfrentó en el duelo final a Marina Rivers, en un espectáculo culinario que dejó momentos para el recuerdo. En el plató, familiares y amigos de ambas finalistas las acompañaron en una velada que celebró no sólo el talento gastronómico, sino también los lazos de amistad que las han acompañado en este camino.
Un menú cargado de historias personales
Con el apoyo del chef Mario Sandoval, Inés preparó un menú inspirado en las etapas de su vida, que comenzó con unas patatas a la importancia dedicadas a su abuela. Este plato sencillo, pero cargado de historia, emocionó a los jueces, quienes lo calificaron como “un homenaje perfecto a la cocina de las abuelas, lleno de sabor y significado”.
El segundo plato, un solomillo de pichón titulado Sacando la patita, fue una oda a la diversidad y al esfuerzo personal. Inés quiso transmitir con este plato la importancia de aceptar los errores y aprender de ellos, un mensaje que resonó tanto en el jurado como en la audiencia.
El broche de oro llegó con un postre llamado Zona de confort, que reflejaba su crecimiento personal y su familia elegida. Con una mezcla atrevida de ingredientes que sorprendió incluso a Dabiz Muñoz, el plato fue descrito como “una fantasía inesperada, inteligente y absolutamente deliciosa”.
La victoria de Inés no solo la consagró como ganadora del programa, sino que también tuvo un impacto más allá de los fogones: la presentadora donará los 75.000 euros del premio a la Fundación Ared, que trabaja con mujeres en riesgo de exclusión social. Un gesto que demuestra que su paso por el programa no solo ha sido un viaje personal, sino también un compromiso con la comunidad.
Marina Rivers: una finalista de altura
Aunque no consiguió la victoria, Marina Rivers demostró ser una competidora excepcional durante toda la edición y especialmente en la gran final. Su menú, inspirado en los lazos familiares y en su lucha contra el acoso en redes sociales, emocionó a los jueces y detacó por su precisión técnica.
“Me llevo una experiencia transformadora. Salgo de aquí siendo una nueva Marina, con más confianza en mi mísma y una nueva perspectiva sobre la vida”, confesó la influencer.
Una noche para el recuerdo
La final de MasterChef Celebrity 9 no solo fue un despliegue de talento gastronómico, sino también un canto a las emociones, las historias personales y los valores. Inés Hernand se suma así a la prestigiosa lista de ganadores del programa, donde figuran nombres como Miguel Ángel Muñoz, Tamara Falcó y Juanma Castaño.
Su paso por el programa deja huella con un mensaje claro: “La vida es un viaje lleno de sorpresas, y está en nuestras manos disfrutarlo al máximo”. Inés ha demostrado que el verdadero ingrediente secreto en la cocina y en la vida es el corazón. ¡Enhorabuena!
Fuente: hola.com
JAVIER CABELLO.