Televisión
Muere a los 82 años María Teresa Campos, mítica presentadora y ‘reina de las mañanas’ de la televisión en España

El mundo de la televisión en España está de luto. María Teresa Campos ha fallecido este martes a los 82 años, tal y como han informado Telecinco, La 1 y Antena 3, las tres cadenas en las que desarrolló la mayor parte de su carrera profesional, así como Lecturas, revista en la que colabora su hija, Terelu Campos.
La veterana comunicadora, que llevaba algo más de un año alejada de las pantallas, había sido hospitalizada de urgencia Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, en la mañana de este domingo 3 de septiembre. Fue ingresada por el Servicio de Medicina Interna “debido a un cuadro de insuficiencia respiratoria aguda”. Así constaba en el comunicado difundido por el centro médico a petición de sus hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego.
En la sobremesa del lunes, un segundo parte, firmado por el doctor Javier Arcos (director médico del hospital), alertaba de que el estado de salud de la periodista y presentadora había “empeorado en las últimas horas”. Se encontraba en estado muy grave.
Desde que se conociera la noticia, los magacines televisivos han prestado gran atención a la situación de la comunicadora. Solo unos días antes del percance había trascendido la decisión de Mediaset de descartar un programa homenaje a Campos, auspiciado por sus hijas, con el que se pretendía poner en valor su figura fundamental dentro del desarrollo de los medios de comunicación, y especialmente de la televisión, en España.
También Ana Rosa Quintana le dedicó un mensaje de cariño: “De ella hemos aprendido mucho. Ha abierto muchos caminos”, afirmaba horas antes de conocerse la fatal noticia.
María Teresa Campos, una larguísima trayectoria en TV
Periodista y licenciada en Filosofía y Letras, Campos nació en Tetuán, aunque creció en Málaga. Sus comienzos fueron tempranos, con apenas 15 años, cuando entró a trabajar en Radio Juventud de Málaga, a la que estuvo vinculada durante dos décadas y donde destacó por programas como Mujeres 72, donde introducía temas de feminismo. Posteriormente, fue directora de los Servicios informativos de Radiocadena Española, Jefa de Programas y emisiones de esta cadena, integrada entonces dentro de RTVE.
Ya a comienzos de los ochenta, estando en Radiocadena Española, comienza a intervenir de forma puntual en televisión. Su desembarco definitivo llegará en 1984, año en que se incorpora a la plantilla de TVE, ha presentado todo tipo de programas, en los que ha abarcado desde información hasta el puro entretenimiento, como Estudio directo, La tarde y Diario de sesiones. Su consolidación definitiva sería como “chica Hermida” de Por la mañana. Tras pasar a Cadena Ser en 1989, un año después volverá a TVE para convertirse en sustituta de Jesús Hermida en el espacio vespertino A mi manera.
Poco después, llegaría su coronación como “reina de las mañanas”, con Pasa la vida en La 1. Con él en la corporación se mantuvo hasta 1996, momento en que ficha por Telecinco. Comienza una primera etapa en la cadena privada que se alarga hasta 2004 y en la que se aferra al título de líder con Día a día, que alcanzó las 2.000 emisiones. Estos fueron “los años más felices de mi vida”, según dijo en la gala de los Premios Iris 2013.
En 2004, dejó Telecinco para pasar a la competencia, a Antena 3. Allí, conduciría otro magacín matinal, Cada día, de vida más corta, y posteriormente el debate Lo que InTeresa. “Yo siempre digo que me fui sin quererme ir, porque realmente yo no me quería ir. Pero las cosas se sucedieron de una manera que me fui (…) quizás porque a veces yo no he cogido las riendas de mi vida y porque me han asustado los negocios, explicó en su día a Ana Rosa Quintana, quien la sucedió como reina matinal, sobre aquella salida.
En 2007, y tras un período de descanso, optó por enfilar su regreso a Mediaset. Esta segunda fase se inició cumpliendo el sueño de presentar informativos, haciéndose cargo de La mirada crítica de 2008 a 2009; y, continuó poniéndose al frente del magacín nostálgico Qué tiempo tan feliz, en las tardes de los fines de semana, en antena desde 2010 y hasta 2017.
Además de esos dos programas, también destacó su vinculación con el universo Sálvame, en calidad de defensora de la audiencia. Igualmente, la última década también sirvió para que entrase de lleno en el ámbito de la telerrealidad con un personality show, Las Campos, donde se narraba su día a día en compañía de sus hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego.
El final de la vinculación entre Mediaset y la presentadora resultó ciertamente agrio, a raíz precisamente de convertirse en un personaje habitual de los programas de crónica social. Los enfrentamientos de la familia con Sálvame derivaron en que el contrato de la veterana comunicadora no fuera renovado. Después de unas aplaudidas intervenciones en La Resistencia de Movistar Plus+, y de hacer sus pinitos en el mundo de internet, con un canal de YouTube propio, fue volviendo poco a poco a la disciplina del canal en 2020, en calidad de entrevistada y, luego, con un programa que pasará a ser el último que condujo en televisión: La Campos Móvil. Producido por La Fábrica de la Tele, solo contó con una emisión, en la que la periodista entrevistó a Isabel Díaz Ayuso.
Tras ello, se había mantenido alejada del primer plano mediático, especialmente después de que su salud comenzase a empeorar, y pese a su afán por seguir trabajando. “Se qué soy mayor, pero eso no quiere decir que sea tonta”, reivindicó en Mi casa es la tuya en marzo de 2.022.
A lo largo de su trayectoria dedicada a los medios de comunicación, Campos ha recibido importantes galardones, como el Premio Ondas (en 1980 Y 2003), dos Antenas de Oro (1994 y 2000), el TP de Oro (1999 y 2004), el Micrófono de Oro (2003), la Medalla de Oro de la Junta de Andalucía, el Premio Iris a “Toda una vida” de la Academia de TV (2013), el Premio Clara Campoamor, concedido por la Secretaria de Igualdad del PSOE (2007) y la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo (2017).
You may like
Televisión
Los coaches de ‘La Voz’, desconcertados con la primera actuación de la gala: “¿Puede ser él?”

La semana pasada se produjo en La Voz una de esas situaciones que sólo pueden darse una vez porque las normas del programa así lo establecen. Los coaches decidieron darle una segunda oportunidad a uno de los concursantes, que había estropeado su actuación sobre el escenario por culpa de los nervios. Todos coincidieron en que Gonzalo Sarfatti, si lograba calmarse, tenía un gran potencial que demostrar.
Malú, Antonio Orozco, Pablo López y Luis Fonsi no sabían en qué gala volverían a encontrarse con él, pero este joven argentino no les hizo esperar: regresó con su guitarra este mismo viernes en los primeros minutos de la tercera gala. Fue el primero en salir a escena.
Les costó apretar el botón rojo, pero finalmente, a pocos segundos de que acabara la canción, todos los coaches se habían dado la vuelta. Sarfatti prefirió fichar por el equipo del artista puertorriqueño.
Televisión
Así afina ‘Camilo Superstar’, el “ni biopic ni musical” de Atresplayer: “Tendría emoción aunque no fuera Camilo Sesto”

El pasado 8 de septiembre se cumplían 4 años del fallecimiento de Camilo Sesto. Lo hacía habiendo visto su imagen pública desvirtuada durante el último par de décadas, reducido su impacto en la música popular en español a nivel global. El single Mola mazo, pista inédita correspondiente a su recopilatorio Camilo Sesto Nº1, supuso un intento por recuperar su imagen como representante del signo de los tiempos, y un descabalgue con respecto a ese mismo contexto. Frente a esa imagen memificada surge Camilo Superstar, la nueva producción original de Atresplayer, segundo caballo de batalla de la plataforma de Atresmedia en su paso por el Festival de Cine de San Sebastián.
Aunque ha sido La Red Púrpura la que ha concitado la atención en el certamen donostiarra, la que nos ocupa sirve a Atresmedia para demostrar la “variedad” que, en palabras del director de Atresplayer, Emilio Sánchez-Ceballos, define su catálogo. Un catálogo a cuya incorporación ya han puesto fecha: el 19 de noviembre. San Sebastián, cada vez más abierto a difuminar las líneas entre cine y televisión, se presenta como el escenario ideal para dar empaque a una obra sobre una estrella enigmática y sobre la que hay más presuposiciones que certezas. Una estrella con la que el tiempo no ha hecho plena justicia, pero que mantiene un cierto poder de fascinación también entre quienes ahora emprenden el desafío de descubrir su relevancia en la cultura pop patria.

“No es un biopic ni una serie musical”, asevera Montse García, directora de ficción de Atresmedia en la presentación ante medios en el Kursaal, poco después de la proyección del primero de los capítulos que conforman esta ficción. Su actor protagonista, esmerado en la mímesis con el intérprete de Algo de mí, lo asevera: “Es una historia que habla de Camilo Sesto porque toca, pero tendría emoción aunque no fuera Camilo Sesto”.
Eso sí, el nombre de Camilo es reivindicado a través de la ficción: “Camilo era un icono cultural global”, explica Curro Novallas. El que fuera responsable de Mentiras, también en el grupo, es el principal motor del proyecto, como director y productor ejecutivo. El equipo creativo principal se completa con Tatiana Rodríguez (Mataharis, La cocinera de Castamar) en el guion y con Sonia Martínez en la producción. Esta última reitera que nunca hubo una intención de hacer “una serie enorme sobre su vida”, de ahí el afán por “contar una buena historia, colocando a un icono cultural en el centro”: “Acotarlo nos parecía muy especial”, indica, y explica cómo Novallas contactó con los autores de Jesucristo Superstar para dar forma a la idea y poder construir el relato en torno al musical.
“Creí que no íbamos a encontrar al actor para hacer esto”
Precisa la productora ejecutiva de Buendía Estudios en que el interés de contar una historia como esta surgió cuando “entró en nuestra vida la familia de Camilo”. En particular señala la función como “ametralladora de anécdotas” de Lourdes Ornelas, la que fuera pareja y madre del único hijo de Camilo, así como de su representante. Ambas personas fueron cruciales para profundizar en la figura del retratado, a través de largas conversaciones y con documentación y material que ofrecieron y pusieron en las manos del equipo.
De esa marmita de información sobre Sesto se extrajo finalmente este segmento vital que abarca principalmente tres años, los que tardó el cantante en levantar el musical, aunque prestando atención, a través del capítulo inicial, en la construcción del icono casi religioso que luego adquirirá tono martírico al empeñar su fortuna en una producción asediada por el régimen y la censura. El juego de espejos entre Sesto y su visión mesiánica de sí mismo, así como el reflejo de esa mitad de los setenta, hacen de Camilo Superstar “una de las series mas complicadas” a las que afirma haberse enfrentado la mujer que levantó La casa de papel.
Para emprender el viaje por la trayectoria de Sesto, Atresmedia confió en Alejandro Jato, emergente actor vigués que había hecho sus pinitos que se había bregado en producciones gallegas de renombre como Serramoura y otras a nivel nacional como Servir y proteger y HIT. Camilo Superstar significa su alternativa como protagonista. “Creí que no íbamos a encontrar al actor para hacer esto”, reconoce Martínez sobre una elección de casting que fue “amor a primera vista”.
Jato se sometió a largas charlas con el entorno de Sesto para componer la composición del personaje, una que se alejara del referente más cercano. A ello ayudó no solo la voz de Lourdes como guía, sino la autobiografía que el propio Sesto escribió sobre quién era él en la intimidad, de puertas para adentro. Ello, sumado a la réplica de ciertos gestos y un trabajo vocal para el que contó con una ayuda de una foniatra, contribuye a la mímesis entre persona y referente.
“Puede haber 500 capítulos hasta el ‘Mola mazo’”
A ese respecto, y especialmente en lo que a la representación de cierta ambigüedad sexual, unos y otros aseguran que “no censuramos en nada” la realidad y, por ende, el retrato del artista, algo que defiende Novallas: “El proceso fue muy natural, con la libertad que sentíamos que pedía el trabajo”. En ese sentido, Martínez recalca el muy distinto signo de los tiempos: al fin y al cabo, Camilo tenía 26 años cuando emprende el proyecto de Jesucristo Superstar, en 1972. “Ganaba millones y tenía casas… Y ahora sería un niñato acabando la carrera”, comenta sardónica la cara de Buendía Estudios.
“Recolocamos el personaje para homenajear a ese icono cultural”, añade Novallas para resumir lo que pretende ser Camilo Superstar: no tanto una serie biográfica, sino un relato de un cambio de era a nivel sociocultural a través de un artista del que seguiremos conociendo solo una pequeña parte.
De hecho, ya advierten que como autores no han sido “incapaces de averiguar” los motivos por los que, después del largo proceso para llevar a buen puerto el musical de en España, decidió dejarlo apenas dos meses después del estreno. “No sé qué se le pasó por la cabeza”, confiesa Martínez, mientras que Jato, a partir de su comprensión de su alter ego, plantea una hipótesis afín al concepto de la serie: “Él funcionaba un poco así, en el enamoramiento. Se enamoraba de algo, de una canción o una persona, y nada le dura, nada permanece. Hay una insatisfacción todo el rato: cuando lo vive, lo vive a tope. Pasó el tren, sintió la llamada, pasó otro tren y se enamoró del que pasó después”.

El noviazgo de Atresplayer con Camilo Sesto se alarga, como hemos advertido, durante cuatro episodios. El grupo de comunicación, que se precia de la variedad tonal entre La red púrpura, preestrenada un día antes, y esta, en las antípodas con una clave colorida y luminosa, marca sus directrices: “La historia es la que nos da. Si da para cuatro, son cuatro”, apunta Montse García, que defiende que no hay duraciones establecidas o predeterminadas al hacer las series con sello Atresmedia.
Ahora bien, Sonia Martínez no se corta en afirmar que “de las conversaciones que hemos tenido podemos tener varias series”: “Puede haber 500 capítulos hasta el Mola mazo. Imagina lo que hay”. Si contará Con el viento en su favor o no será algo que habrá que esperar a ver una vez a partir del 19 de noviembre. En todo caso, cuatro años parecen suficientes para redescubrir al Camilo detrás del Superstar.
Así es ‘Jesucristo Superstar’
Camilo Sesto, en un arrebato de inspiración, decide adaptar en los años 70 el musical más moderno y transgresor de la época, Jesucristo Superstar, un éxito internacional que, en plena dictadura, consigue revolucionar el país y hacer historia.
Una odisea llena de contratiempos, algunos fortuitos, pero muchos de ellos provocados por la propia coyuntura del momento. Sortear la censura, la mano negra de su representante, las amenazas y sabotajes de los movimientos ultracatólicos dispuestos a todo por impedir su estreno, se irán intercalando con las dificultades inherentes a un montaje de esta envergadura.
Pero no estará solo en esta gesta. Contará con otros idealistas que, como él, sintieron el impulso de arriesgar y traer a este país la ópera rock más revolucionaria del momento. Los cuatro mosqueteros de esta odisea se enfrentarán a todo tipo de obstáculos. Buscar un teatro adecuado, sortear la censura, asumir el despliegue técnico que exige la obra, seleccionar al elenco y estrenar el musical mientras Franco agoniza. Además, Camilo debe cumplir sus compromisos con la discográfica que le exige entregar su próximo álbum en las mismas fechas.

Televisión
‘Aladdin’ (10.5%) cumple el deseo de Telecinco, pero ‘La Voz’ (18.3%) tiene un genio mejor

Esta vez sí, Telecinco se ha llevado una pequeña alegría con su ciclo de estrenos de Walt Disney. Tras haber emitido con muy poco éxito algunas de sus últimas películas, la cadena de Mediaset protagonizó este viernes una notable subida en el horario de máxima audiencia.
La nueva versión de Aladdín (2019) –encabezada por Mena Massoud, Naomi Scott y Will Smith– reunió frente al televisor a 1.006.000 espectadores, el 10.5% de quienes lo tenían encendido. No es una cifra demasiado alta, pero el consumo de televisión está desplomado y Telecinco no está teniendo mejores datos que estos (en septiembre promedia un 9.6%).
La película de la semana pasada, Frozen II, apenas llegó al 7.1%.
Eso sí, el ‘genio de la lámpara’ no hace milagros: Aladdin se quedó muy por debajo del programa que lidera las noches de los viernes. La Voz se inmutó más bien poco ante la mágica historia de Telecinco. El talent show de Antena 3 volvió a liderar sin problemas, esta vez con el 18.3% de la audiencia (siete décimas menos que la semana pasada), casi 1,6 millones de espectadores.
El cine de La 1 retrocedió dos décimas al dar Un golpe con estilo (8.2%), y el de Cuatro cayó al 4.7% con la ayuda de John Rambo (-1.3 puntos). laSexta Columna (6.2%) ganó tres décimas y Equipo de investigación (6.7%) avanzó otras dos.
Por la mañana, la segunda votación para investir presidente de Alberto Núñez Feijóo reunió al 18.1% de la audiencia en la retransmisión de La 1, superior a la cobertura que hizo laSexta con Al Rojo Vivo (12.3%).
En la tarde, sin embargo, la cadena pública no tuvo tantos aciertos: La Moderna (8.6%) perdió 1.2 puntos y La Plaza se hundió al 6.1% (-1.5), aunque La Promesa (13.2%) siguió dándole alegrías. Cosa que agradecería Telecinco, pero TardeAR, el nuevo magacín de Ana Rosa Quintana, repitió ayer su peor dato de audiencia: un 9.5% de cuota de pantalla.
Radio Millenium Online


Simulacro de ataque nuclear de Rusia: afectaría a 11 zonas horarias distintas

Pavo con salsa de queso

El leopardo y el manul
Tendencia
- Astrología y Espiritualidad2 años ago
Calendario Chino
- Cocina2 años ago
Tortilla Española o Tortilla de Patatas
- Cocina2 años ago
Ponche Crema Venezolano
- Ciencias y Nuevas Tecnologías3 años ago
«Este agujero negro recién descubierto podría ser una reliquia creada antes de que se formaran las primeras estrellas y galaxias»